Me encontré a un viejo una noche
harapos el vestía
no tomaba solo nunca
Sólo en compañía
él se transformaba
al caer el día
él tenía que tomar
sino se moría
Laburaba de peón
Ese era su oficio
jamas su mísero sueldo
valió todo el sacrificio
Los vapores del alcohol
lo libraron de ese peso
eligió mi compañía
y yo brindo por eso
brindo por eso
después de varias botellas
el me dijo su verdad
le vendió el alma al diablo
bebiendo en soledad
poder vivir por siempre
un precio tenía
el tendría que tomar
siempre en compañía
Atrapado me quedé
esa noche con su historia
necesito más alcohol
para librar mi memoria
me alcanzó la maldición
ahora soy yo quien está preso
ahora vos tomás conmigo
y yo brindo por eso