Me encontré a un viejo una noche harapos el vestía no tomaba solo nunca Sólo en compañía él se transformaba al caer el día él tenía que tomar sino se moría Laburaba de peón Ese era su oficio jamas su mísero sueldo valió todo el sacrificio Los vapores del alcohol lo libraron de ese peso eligió mi compañía y yo brindo por eso brindo por eso después de varias botellas el me dijo su verdad le vendió el alma al diablo bebiendo en soledad poder vivir por siempre un precio tenía el tendría que tomar siempre en compañía Atrapado me quedé esa noche con su historia necesito más alcohol para librar mi memoria me alcanzó la maldición ahora soy yo quien está preso ahora vos tomás conmigo y yo brindo por eso