En grises calles infectadas de tensión, sucias paredes, dejan ver la desunión. Todo está prohibido. Salvo ser uno mas de los que olvidan y piden seguridad. Suicidando mis horas estoy, mientras insanos sigan viviendo. Encadenados al desamor, a la división, su ciega ambición. Solo escapo en la noche con la desolación. Ángeles vienen a agudizar mi intuición . Con el hecho convivo, al esquivar al represor programado para matar Suicidando mis horas estoy, mientras insanos sigan viviendo. Encadenados al desamor, a la división, su ciega ambición. Se está cumpliendo la divina predicción, y el desconcierto aumenta el descontrol. Bombas latiendo, pretenden extinguir el vil engendro de un planeta sin amor.