Yo no me conozco cuando me acerco a ti, todo es en mí gozo y entonces te acercas tú, y desde esos momentos en que no soy yo mismo, sino algo de ti. Tú eres mi felicidad, caminando ahí. No sé si está claro que yo me muero por ti, los demás al diablo yo hablé de que piensas tú. ¡Claro que me importa lo que tu piensas de mí! Si yo estoy aquí ¡Cuánto de mí es solo tu voz encarnada en mí! Y aunque de mi madre ese coro diría yo no sé si se entiende cuán especial eres tú hasta el punto que has transformado incluso en mi voz mi vida anterior y eso que de mí te gustó tú lo has salvado. Y aunque ambos sabemos que no hay deudas de amor gracias a ti por cultivar mi lado mejor gracias por aprender conmigo a hacer el amor que no sabia yo y eso que de mí te gustó tú lo has salvado. ¡Cuánto de mí es solo tu voz encarnada en mí! ¡Cuánto de mí es solo tu voz encarnada en mí!