En este patio de muertos me toca vivir, Son veinte y la cama: almíbar seré. Mientras se cuecen las habas te quiero decir: Olvídame fuerte, igual que te amé. Nunca seremos harina del mismo costal, Le pido lumbre a sus ojos y se echa a llorar. Me bebo el aceite por ti De los pezones del aire, Tierno estaré y, aun así, No me beses en la boca: Soy vinagre. Replegaré las ojeras, no pienso remar, Iré contra el faro: tú desnúdate. Llévate miel y maldice mi estampa al pasar, Deshójame el trébol: yo te mentiré. Nunca me cuadran las cuentas después de volar, Salen impares las alas, los nidos de más. Me como las pieles por ti De los nudillos del tiempo, Solo estaré y, aun así, No me beses en la boca: Soy cemento. Me empapo de otoño por ti, Sé que los labios te arden, Frío estaré y, aun así, No me beses en la boca: No soy de nadie.