Por la maana yo me levanto y voy corriendo desde mi cama para poder ver a esa chiquilla por mi ventana. Porque yo llevo to el da sufriendo, ya que la quiero con toda el alma, y la persigo en mis pensamientos de madrugada. Tengo una cosa que me arde dentro que no me deja pensar en nada, ay que no sea de esa chiquilla y de su mirada. Estribillo: Y yo la miro. Y ella no me dice nada. Pero sus dos ojos negros se me clavan como espadas. Pero sus dos ojos negros se me clavan como espadas. Ese silencio que me desvive me dice cosas que son tan claras que yo no puedo, no puedo, no puedo dejar de mirarla. Y yo le tengo que decir pronto que estoy loquito de amor por ella y que sus ojos llevan el fuego de alguna estrella. Que las palabras se quedan cortas para decir todo lo que siento, pues mi chiquilla es lo ms bonito del firmamento. Estribillo.