Cecilia bebe tu copa y muéstrame cómo en el rosado de tu placer me puedo meter Rodaba ya una alegría eterna en aquel bar de ayer cuando soñábamos amanecer piel contra la piel Y no queda serenata alguna para calmar tu sed si sigues soñando amanecer piel contra la piel No queda trago o copa alguna para calmar tu sed vientre contra vientre hay que mover tiene que doler