Entre las carnes del fracaso y la apatía surge el esfuerzo de poder continuar,
Sale la fuerza cuando nadie la tenía, la vida es vida y no tiene nada más…
Y por las sombras que aún guardan cicatrices se oye una voz prohibida que quiere jugar.
Hay protección pero yo no soy tu escudo, hay dos engaños y uno sabe traicionar.
Las babas de tu idea recubren las casas, los muertos y sus niños saben reaccionar,
A cabezazos rompen las reglas marcadas, mueve su ficha el diablo sin mostrar su As.
¿Por qué será que los chicos del barrio lo que quieren es un tipo al que temer?
¿Por qué será que en las calles de abajo llueve ceniza y la frontera es de papel?
Ninguna luz iluminó nunca el camino y en los barrotes dejó firmas la razón,
Triste es la estampa de las piedras bendecidas que sepultaron en el barro su misión.
Hay un Segundo y no consiente tonterías, Primero dice que no accede a un sucesor,
El Tercer puesto llora al fondo del tranvía y el cementerio hace de tripas corazón.
Vende la muerte flores secas en la esquina, se cierra un trato con perfume a comisión,
Se oyen disparos pero se escuchan sirenas… era la una en el can*l número dos.
¿Por qué será que los chicos del barrio lo que quieren es un tipo al que temer?
¿Por qué será que en las calles de abajo llueve ceniza y la frontera es un papel?
¿Por qué será que las chicas del barrio lo que quieren es un tipo al que temer?
¿Por qué será que en las calles de abajo llueve ceniza y la frontera es de papel?