Traje los cuadros
a la bella ciudad de París
con profunda tristeza
por mi Chile.
Todos mis amigos vinieron
al puerto para acompañarme
cada uno llevaba en sus manos
todas mis cosas.
Y cuando llegamos
sobre el agua danzaba la nave
y cuando apareció un pañuelo blanco
yo sonreí.
Al fin estoy en París
camino cerca del Sena
y sobre el puente del Louvre
mi corazón llora.
Estoy ya en la oficina
cara a cara con la secretaria
cuando escucho un timbre
que me llama.
En seguida vi delante de mí
al capitán del museo
era muy gentil
el señor Faró
Ah no es cierto Ivonne?.