Sus manos tenía y con ellos me tocaba, la cabeza guardaba y sus labios besaba, ella me evitaba y de otros se beneficiaba, disfrutaba de la vida, cuando ella vivía
Recuerdo el aroma que su cuerpo desprendía, ahora la putrefacción
Invade su cuerpo, las carnes descompuestas segregan líquidos, creo que ahora no puedo soportarlo
Ahora no puedo ni tocarte, sin embargo sigo amándote
Aunque ya no pueda ni acercarme, con mirarte he de conformarme
El amor se va perdiendo, creo que de nuevo he de enamorarme
Sus manos todavía tengo, aunque ya no son delicadas, su cuerpo ya no es femenino, sólo son pellejo y huesos