Dos de la mañana, ciento veinte por hora Llueve, la autopista está vacía Voy solo, eso creo y mi pensamiento Se llena de tu imagen, tan tranquila El suelo mojado refleja las luces Como fantasmas. Tus ojos, tu voz Tus labios me aturden... como fantasmas Dos de la mañana, un accidente hay ambulancias Voy solo, eso creo, ¿dónde estás, quién eres? Luces, muchas luces, vuelvo a las luces...
Me hipnotizan: la lluvia, el limpiabrisas Las luces... y tu mirada ¿Por qué? ¡No fui capaz de hablar! ¿Por qué? ¡No pude decir nada! ¿Por qué? ¡El amor me hace un cobarde! ¿Por qué? ¡La imaginación me enmudece! A esta hora voy por la autopista, solo Hace diez minutos no dijiste... ¡Nada! Solo en la autopista, no dejare que me dejes ir...