No te condena por nada
Quién está libre de culpa
En el fondo somos iguales
El mismo patrón nos corta
Desnudemos la conciencia
Que ata de pies y manos
Mostrémonos como niños
Que no creen en pecados
Hoy voy a cruzar
La piel y el alma
Para juzgar.
Hoy me pasaré
Al otro lado del espejo
Nadie es quien para juzgarte
No hay una verdad suprema.
No esclavices tus deseos
No mereces la condena
Estancados por el miedo
Ocultamos sentimientos
Caundo el prójimo es culpable
Ya no creo en mandamientos
No doy clases de moralidad
Porque amarte fue pacado
Renuncié a mi cielo eterno
Por tenerte entre mis brazos