No te alegres Muerte, hoy con tu victoria, pues mi madre
Vive toda en mi memoria. No te enorgullezcas si me ves
Llorando, yo no me avergüenzo de estarla extrañando.
Me ha enseñado, Muerte, a no tenerte miedo.
Mi querida vieja se fué combatiendo.
No te enorgullezcas Muerte, tu triunfo es vacío,
Yo su amor protejo y ella cuida al mío.
Decir adiós, es difícil camará pero aún lo es mucho más
Cuando se le da a una madre. Deja un vacío, imposible
De llenar, por toda una eternidad: huérfano es el amor mío.
Madre, sólo hay una en la vida.
Dorme, Dorme, o meu amor.