De un dulce ser tas enamorao no puedes vivir della separao no es una mujer ten mucho cuidao o acabarás loco destrozao. Huérfano de la suerte el desprecio te envenena frío temple de la aguja traspasa ahora tus venas tu sangre sabe a muerte y ya na ni naide y ya naide ni na vale la pena. Día a día te puedes ver en tu espejo encantao cuanto más bello puedas parecer ella te habrá secuestrao. Huérfano de la suerte el desprecio te envenena
frío temple de la aguja traspasa ahora tus venas tu sangre sabe a muerte y ya na ni naide y ya naide ni na vale la pena. Con el alma enegrecía y las pupilas contraías a tol mundo maldecías viendo tu cuerpo como moría. Habrás muerto sin fallecer y el alma te habrá robao has perdío sin saber to lo que te han quitao toavía puedes escoger porque este bello cuento esta dulce historia no ha terminao.