Paso el dedo por la superficie de esta jungla de concrete
¿Qué es esto, es polvo, es hollín?
Mira aquella nube negra de mosquitos de estanque de allí…
Huele a tierra seca y a orín
Simulacro de ruina
Tú crees que hay una realidad, una cortina de humo y uno que mira
Mentira: todo es humo, todo es cortina, todo son grados de densidad de una neblina
Mira al hombre como saca pecho en aquella cima de escombros
Mira toda esa sangre fluyendo
¿cuántos litros dando vueltas dentro de todos esos cuerpos?
Carne pudriéndose y creyéndose el centro
Putrefacción en time-lapse
Esto parece un rocódromo de almas
Abrazos de boxeador cansado, la calma del bombillo fundido
Del hacha de sílex al misil teledirigido
Todas esas caras, míralas, cómo fijan sus pupilas en aquel horizonte líquido
Esperando visualizar un día cualquiera
El blanco de las velas y las maderas de las carabelas
Réplicas a escala del pecado original
Apiladas máscaras de deidad
El slang de los ángeles, luciferinos llantos, llantos de Ícaro cayendo
Llamas loco a aquel de allí que habla sólo y hace aspavientos
¿y si se está quitando telarañas que tú no estás viendo?
Conque, ¿quién sos tú?
Visita tu interior si tienes valor, igual te llevas un susto…
Alors, por el momento sólo te digo que esta letra me la escribí en su momento
Justo para este momento:
Todo cobra un sentido impresionante por momentos
Alors, mi vida es una “fight against the ugliness”
Como decía el diseñador
Conque, a veces subo al stage, y saco mi kit de hipnosis
Y subo a alguien del público sin previos pactos (no, no soy un timador)
¿Cuántas veces me habré despegado de este asfalto, de este puerto?
Hoy te vas a mamar el canto de este isleño, Calipso
Te voy a dejar preñada, Circe, con este canto…
Que quiere ser la canción que sonaba en el radio ca**ette
De mi abuelo alicatando suelos
Que quiere ser, la canción que cantaba mi abuela
Mientras empaquetaba tomates en aquel almacén
Yo quiero ser la canción que sonaba en el radio ca**ette
De mi abuelo alicatando suelos
Yo quiero ser la canción que cantaba mi abuela
Mientras empaquetaba tomates en aquel almacén (que en Paz descanse)