Dicen que hay vientos del sur capaces de hacer
Que el hombre más cuerdo en la Tierra llegue a enloquecer.
Bien, uno de esos tal vez me obligó a terminar
Esta canción en tu honor, desde el norte con amor y con absurdidad.
Y dicen que incluso Caín tuvo una buena razón,
Y que su causa oculta no era otra que la revolución.
Con todo, no puedo afirmar con seguridad
Si era Caín o era Abel quien te pedía piel para llevarse algo más.
Y si me ves huir otra vez pretextando ansiedad
Es que el aire aquí es denso y me invita a rezar:
Así danos la paz, danos la paz, danos la paz.
Y bien, quisimos partir algún que otro reloj,
Pero él halló las manecillas bajo el colchón.
Y cuando el tiempo advirtió nuestra estupidez,
Sentíamos algo una vez y justo todo lo contrario tan sólo un
Minuto después.
Clara está aquí e insiste en preguntar
Si acaso no baso mi vida en una irrealidad.
Yo dudo durante un segundo antes de responder.
Le digo: "Aún siendo así, hoy quiero vivir, y viviré"
Y sabe Dios que haré por esforzarme en conservar
Todas mis facultades intactas desde hoy.
Bueno, esto no puede ser más que otro adiós,
Pero antes quisiera pedirte un pequeño favor.
Si tienes un rato allí, ¿me querrás enviar
Algo impregnado en tu olor, desde el frente con amor y
Con absurdidad?