Hey, aún recuerdo aquel viernes
que te entró la pálida, casi sin poderme avisar
sujetándote la frente,
cuesta abajo, cuesta arriba se te hacía el caminar
no me des las gracias no,
yo lo hago por tí igual que tú lo harías por mi,
sin pedirlo y sin decirlo, aquí está mi hombro
si quieres echarte a dormir.
Eima cuanto quieras estate aquí
Eima no lo tienes que pedir
Eima cómo yo explicarte...
todo lo importante que significaste para mí
y el que no te quiera y te busque mal me encuentre a mí.
Hey, tú ya no te acuerdas, en la misma juerga y en distinto lugar
tuviste que salir por piernas, y sacarme para fuera para poder respirar
no me des las gracias no,
yo lo hago por tí igual que tú lo harías por mi,
sin pedirlo y sin decirlo, sin pagarlo aquí está mi hombro
si quieres echarte a dormir.
Más que el tiempo en bicicleta, corre el agua más que el vino
y siempre llega, más perduran los cariños, dan respiros
cuando aire se echa a faltar,
siempre dije que jamás jamás lo haría,
dudar de tu presencia de tu ausencia y tus venías
y a la hora de la verdad, si he dudao de tí o de mi misma,
no pongas más distancia cuando buscas cercanía.