Entre decisiones sorteamos la vida, eligiendo a diario.
Quitando espinas, cortando los lazos. Que nos prohíben seguir.
Quizás valentía rodeada de errores, pero valentía al fin.
Buscando la clave que traiga equilibrio.
El saber perdonar para despedirse.
Para despedirse.
Si brilló el sol, ¿por qué la vergüenza en admitir?
Si brilló el sol y nos encandilamos al mirar.
Perdimos las huellas, que nos costó lograr.
Pero hubo sol, no lo vas a olvidar.
Cerrando la puerta para emprender viaje, saldando con llanto.
Poniendo los naipes sobre la mesa y dar otra mano.
Tener la grandeza de tomar lo bueno, para apreciar
que lo que vivimos no fue en vano. No fue en vano
Pero hubo sol, ¿por qué la vergüenza en admitir?
Si brilló el sol y nos encandilamos al mirar.
Perdimos las huellas, que nos costó lograr.
Pero hubo sol, Si brilló el sol.
Pero hubo sol, ¿por qué la vergüenza en admitir?
Sí, hubo sol y nos encandilamos al mirar.
Perdimos las huellas que nos costó lograr.
Pero hubo sol. Sí, hubo sol.
Y brilló el sol, no lo voy a olvidar.
No lo voy a olvidar.