(Mauricio Pauly y Gabriel Montagné)
Y cada vez que vuelve el sol
Me abro a las palmas que se baten en mis ojos
Siempre que salto al corredor
Me envuelvo en las yemas de lo que quiebro para mi
Y con los dedos me acaricio
La nieve de mis hombros fríos
Y con los dedos los moldeo
Adaptándome a tu forma dulcemente
Frente al vidrio me pavoneo
Me peino la piel sobrante
Y cada vez que vuelve el sol...
Con los dedos me acaricio
La nieve de mis hombros fríos
Con los dedos los moldeo
Adaptándome a tu forma dulcemente