Poder del Cielo Bajó a la tierra El Señor se humilló y sufrió por nosotros Entregó a su hijo por amor Muertos en delitos y pecados Desechábamos la ley de Dios Pero mi Padre tuvo misericordia de toda la creación Y derramó su sangre hasta morir en la cruz Yo soy testigo del amor de mi Padre Quien siendo Santo se hizo pecador Y por su llaga fuimos todos curados El poder de Dios sigue a los que creen Y los cristianos somos dados por testigos a las naciones Llevando el evangelio a toda criatura A todo corazón enfermo y a todo cuerpo sin vida Dejemos de pisar la sangre de Cristo Y démosle la honra que Él se merece Rompe las cadenas que te atan a la muerte Y empieza a caminar hacia el Redentor